El guiño (Texto publicado en el Nº 40 de la revista Speculum, del Club de Letras de la UCA)

El guiño

Ese fraile siempre estuvo allí, en el salón de casa, arriba del sofá, presidiendo todas nuestras comidas, peleas y celebraciones. Era la joya de la familia. Mis padres se sentían orgullosos de haberlo conservado durante varias generaciones.

Para mí, era un cuadro grande, tenebroso y horrible. Representaba un fraile con una mano en el corazón y la otra postrada en un atril, con mirada entre alocada y perdida. Era un claroscuro, más bien oscuro con un toque marrón, como las películas antiguas de arte y ensayo.

Nunca me gustó, me infundía miedo y falso respeto, yo siempre pasaba corriendo para no verlo, pero inescrutablemente mis ojos lo observaban de soslayo. Estaba tan bien pintado que daba la sensación de que nos miraba fijamente a todos y a ninguno.

Alguna que otra vez le planteé a mi madre colgar en su lugar el “payaso a óleo” que pinté en el colegio y ella sonreía diciéndome: “cuando seas mayor entenderás por qué es éste el cuadro que preside nuestra casa”.

Cuando me hice mayor y faltaron mis padres, me planté delante del cuadro y por primera vez mi mirada fue desafiante, pero, cuál sería mi sorpresa que el lienzo salió del cuadro y el fraile salió del lienzo y me dijo:”inculto, yo soy un “Zurbarán”, una joya pictórica del siglo de oro y si mi mirada está perdida es porque plasmo con rigor el misticismo de la época”. No le dejé ni terminar, porque soy inculto pero no tonto.

Como afortunadamente el marco aún seguía en la pared, lo recompuse con la archiconocida acuarela gaditana del Campo del Sur, con catedral incluida, y marqué el número de la casa de subastas londinense Sotheby´s.

Con el dinero recibido y, para superar los traumas infantiles y paliar mis abundantes lagunas pictóricas, estoy recorriendo las pinacotecas más importantes del mundo.

Juraría que en la sala dos de la National Gallery y, al pasar por delante de la escuela sevillana de pintura, un fraile me ha guiñado un ojo.

07/10/18

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Nº 40 de la revista Speculum del Club de Letras de la UCA 02/06/2020

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