La sordera
¿Me
oyes? ¿Me escuchas? Siempre hago estas
preguntas a todos los que me rodean, porque tengo la sensación de que están
ausentes cuando yo hablo. Dicen que soy egocéntrica, que no tengo empatía y que
mi incontinencia verbal es desmedida.
Contigo es diferente, a pesar de que sólo hace
veinte minutos que nos conocemos, eres la persona
que mejor me comprende, contigo
soy mi auténtico yo y te he contado todo lo que hace años me atormenta y me
hace feliz. Me siento completa a tu lado, en este rato me has hecho reír y
llorar. Nuestra enriquecedora conversación me ha dado refuerzo y vida.
Todo esto lo iba relatando sin percatarse de que su
contertulio era sordo y no leía los labios.
06/10/18
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